Infraestructura y Construcción para Crecer como Debemos

  “El crecimiento en la mayor parte de la región de América Latina y el Caribe en el primer semestre del año fue más débil de lo previsto… …La actividad se vio frenada por estrangulamientos en la infraestructura, el retroceso de los precios de las materias primas y, en algunos casos, la aplicación de políticas más restrictivas.  La desaceleración inesperada en México tuvo que ver con la disminución del gasto público, el enfriamiento de la actividad en el sector de la construcción y la demanda anémica en Estados Unidos.”  (IMF, 2013)

Introducción

En el mes de octubre de 2013 se llevaron a cabo las Reuniones Anuales “Retos Globales, Soluciones Globales” del Fondo Monetario Internacional en Washington D.C.  En estos días, los ojos del mundo estuvieron concentrados en “El Distrito” con forma de diamante para escuchar a las y los líderes económicos del mundo, además de revisar los documentos estratégicos que se presentarían, como el informe “World Economic Outlook”.  Con respecto a México, si dos de las tres razones que señala el IMF que impactaron en el flaco crecimiento de la economía mexicana tienen que ver con la infraestructura y su construcción, vale la pena preguntarse, ¿Qué tan grave es esta situación?  ¿Qué está sucediendo en el mundo y cómo impacta en la forma de hacer infraestructura?  ¿Qué debe hacer México para recuperar el terreno perdido?

Economía Anclada:  ¿Qué tan grave es esta situación?

La titular del FMI, Christine Lagarde, dijo que “México ha pasado por muchas reestructuraciones y tiene buenas y predecibles políticas fiscales.  El actual proceso de reformas estructurales la hará más sólida todavía.  Ha habido fluctuaciones del peso frente al dólar de julio a agosto, pero eso no ha dañado la economía mexicana, que se recuperó de ese trance en septiembre, de modo que la economía está bien anclada y la gente sabe que es sólida.” (La Jornada, 2013)  Si bien son bonitas palabras para los mexicanos, no debemos olvidar que el pronóstico de crecimiento económico del FMI para el 2013 ha pasado de 3.5 por ciento a 1.7 por ciento, para ser reajustado al actual 1.2 por ciento.

Últimamente se ha incrementado la presión sobre el gobierno federal, que decidió dejar de invertir en gasto público hasta que las reformas estuvieran listas.  La presión de la sociedad y las instituciones se incrementa cada día.  Al mismo tiempo, el crecimiento de la economía familiar es igual de raquítico que el de la macroeconomía.  Por tanto, la situación es negativa, y sin ser grave aún, tiene el potencial para llegar a serlo.  Hay que ocuparnos hoy para evitar preocuparnos mañana.

Metrópolis que son Motores:  ¿Qué está sucediendo en el mundo y cómo impacta en la forma de hacer infraestructura?

El mundo está experimentando el increíble regreso a Ciudades-Estado en lo que respecta a la economía.  Los gobiernos se podrán apagar, pero las ciudades no se apagan.  La Economía que viene, o mejor dicho, la Economía que ya llegó, es un modelo basado en hacerse cargo y hacer el trabajo bien.  La nueva economía tiene intensos requerimiento de innovación, además de exportaciones, y energías bajas en carbono.  Para consolidarnos en ella, vivimos una transición en la que interactúan la invención, la comercialización, la manufactura y los trabajadores cualificados.  (The Brookings Institution, 2013)

En primer lugar, la innovación en tecnologías inteligentes se acumulará hasta construir ciudades sustentables que combinen telecomunicaciones, integren servicios públicos, promuevan la productividad y conecten a las y los ciudadanos.  En segundo lugar, las energías bajas en carbono requerirán de mayor desarrollo de las energías renovables y sus instalaciones, además de generación y distribución de energía eficientes, y creación de infraestructura para vehículos eléctricos.  En tercer lugar, las exportaciones y el comercio internacional impulsarán la colaboración para crear instalaciones de producción avanzada, corredores de carga, y tanto aeropuertos como puertos marítimos más sofisticados que aquellos que hoy existen.

Los tres motores económicos convergerán hacia el ser humano.  La mayoría de las personas vivirán en ciudades, y demandarán más y mejores trabajos.  Dichos empleos requerirán conectar a los trabajadores con el lugar de trabajo, pues se tendrá que mejorar el acceso al transporte.  Las ciudades tendrán que ser reconstruidas para ser sustentables antes que derrochadoras.  El gran reto de las ciudades es permitir que los sueldos de las familias sean lo suficientemente justos para que les permitan consolidarse en la clase media.

Abrir el grifo e invertir mejor.  ¿Qué debe hacer México para recuperar el terreno perdido?

La infraestructura es crítica en esta nueva economía y en la consolidación de la clase media, pues requerirá desarrollo de tecnologías –de telecomunicación, de energía, de transmisión y de distribución de recursos-, infraestructuras tradicionales –transporte y agua- y de infraestructura social –espacios públicos y edificios enormes-.

Nada de esto podrá ser posible contando únicamente con el sector público, que cada cierto tiempo decide suspender gastos discrecionales –infraestructura, educación, vivienda, desarrollo e investigación- y los transfiere al sector privado.  Así, los proyectos público privados (PPP’s) deberán regulados de mejor forma y más rápidamente.

De forma concreta, lo que México debe hacer es:

• Publicar ya el Programa Nacional de Infraestructura a partir del Fondo Nacional de Infraestructura
• Ejecutar inmediatamente el gasto público rezagado y ajustarlo cuando las reformas estén listas
• Establecer un marco de trabajo homogéneo con respecto a la infraestructura, que esté basado en las necesidades y experiencias de las ciudades, que son las que mueven y seguirán moviendo la economía
• Favorecer la creación de PPP’s, que si bien se han promovido, no se han explotado con suficiencia
• Promover las buenas prácticas y realizar los proyectos con seriedad y sin prisa para evitar los sobrecostos
• Dar facilidades que dejen de estrangular el sector de la construcción y la infraestructura, que además de permitir el avance del país, promueve la construcción de empleo a bajo costo
• Promover la sustentabilidad e inteligencia de las ciudades y espacios, aportando al desarrollo de la computación ubicua
• Consolidar a México como un hub logístico del mundo que enlace Estados Unidos, Asia y América Latina

En conclusión, el año ha sido difícil, económicamente hablando.  Aún así, son tantos y tan abruptos los cambios en el mundo, que brindan oportunidades para todos los países.  México sigue siendo un país seguidor antes que un país líder en propiciar estos cambios, pero la dinámica de los mismos democratiza nuestra oportunidad.  Aprovechémosla tomando las acciones que nos permitan estar en ventaja.

Trabajos Citados

• IMF. (octubre de 2013). Transitions and Tensions: World Economic Outlook October 2013. Obtenido de International Monetary Fund: http://www.imf.org/external/pubs/ft/weo/2013/02/pdf/text.pdf
• La Jornada. (12 de octubre de 2013). La economía de México “está bien anclada”, dice la directora del FMI. Obtenido de La Jornada en Línea: http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2013/10/12/213351471-la-economia-de-mexico-esta-bien-anclada-asegura-directora-de-fmi
• The Brookings Institution. (2013). Can-Do States: A New Era for Infraestructure Investment. Washington D.C.: The Brookings Institution Press.